La Restauración está de moda y, en estos días de «estrellas Michelín», de la cocina de autor, de la innovación y de tanta deconstrucción, nitrógeno, gelificantes y espesantes, humos y aires, trampantojo, alginatos, sopletes y Paco jet, gastronomía molecular y un largo etcétera de nombres y apellidos de la culinaria moderna, afortunadamente, siguen estando presentes los Grandes Restauradores, los tradicionales, los que todavía ofrecen la «cuchara», los platos de temporada, los que reciben en sus espacios para disfrutar de una cocina sencilla pero llena de sabores, texturas y aromas que nos recuerdan los fogones de las madres y abuelas.
Pero esto no sería suficiente sin la hospitalidad y el calor de los que reciben y hacen de la estancia y la comida un recuerdo permanente que anima a volver en la primera oportunidad que surge.
En la calle Santa Catalina nº 12 de Madrid, al lado del Congreso de los Diputados, se encuentra el restaurante «El Rincón de Esteban» que dirige su propietario Esteban González Moreno, personaje entrañable, profesional de grandes hechuras, de trayectoria hecha a base de esfuerzo que recibe, atiende, sonríe, abraza y habla lo suficiente para que el comensal sienta el calor del que sabe, conoce y practica el buen hacer de una Hostelería de presente y futuro que representa a los miles de establecimientos que se encuentran repartidos por la geografía nacional. Son todos aquellos, como El Rincón de Esteban, que su verdadera «michelín» se la otorgan cada día sus fieles clientes.
Jesús Felipe Gallego y Esteban González Moreno
Y, a Esteban González Moreno, le acompañan en su quehacer diario un grupo de profesionales que forman parte de la «orquesta» que dirige con sabiduría y estilo este Restaurador ejemplar, abulense de origen y madrileño de toda la vida.
El vino en la sociedad del siglo XXI. |