El planeta Tierra está recibiendo a su ciudadano o ciudadana siete mil millones, ¿Somos muchos o todavía cabemos más?. Me recuerda esta cifra el documento » Los Límites del crecimiento» que se publicó en el año 1972, escrito por un grupo de expertos dirigidos por Donella Meadows, doctora en Biofísisca por la universidad de Harward, fallecida en 2001 y que había encargado el Club de Roma al Massachusetts Institute of Technology.
El estudio, que fue revisado en 1992 y 2002 (Los límites del crecimento, treinta años después), analiza las tendencia relacionadas con el crecimiento de la población, la economía, el medioambiente, la pobreza, etc., está en plena vigencia ahora que se habla tanto de sostenibilidad o desarrollo sostenible.
Uno de los problemas que existen y de difícil solución es la concentración de la población en las ciudades. Las zonas rurales van quedando vacías y sus hombres y mujeres acuden a las grandes urbes buscando solución a sus problemas de trabajo, vivienda, educación, sanidad, etc. Así se ha ido construyendo los macroespacios como Nueva York, México DF, Tokio, Nueva Delhi, El Cairo, etc.
Si juntáramos los habitantes de estas ciudades podríamos crear un continente. La pregunta es ¿por qué se ha llegado a esta situación?. La respuesta es bien sencilla, ha sido la política llevada a cabo, año tras año, obligando a los ciudadanos de los pueblos y localidades rurales a salir de lugar de nacimiento para ganarse la vida o encontrar otras posibilidades. Las realidades en muchos casos se vuelven duras, difíciles y, a veces, insostenibles.
Las producciones agrícolas han ido reduciendo su valor y, en otros casos, los grandes capitales están comprando grandes extensiones de terreno, como está sucediendo en algunos países de África, para asegurarse materias primas (cereales, principalmente) de cara al futuro, convirtiendo a los propietarios de las tierras en meros asalariados si, con suerte, son contratados.
En nuestro país, sucede algo parecido con las grandes capitales, Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao, etc., donde la población crece y, en estos últimos años, con ayuda de la inmigración, aunque ahora con el tema de la crisis algunos retornen a sus países. Muchos les encantaría volver a sus raíces pero el reto de volver a empezar se hace muy duro en el campo, aunque las condiciones actuales no sean las del pasado.
En realidad, el problema actual no es del número de habitantes, sino de como se distribuye la riqueza que hay y se produce en la Tierra. En nuestro mundo cercano, con los cinco millones de parados que nos han anunciado (oficialmente, una mala noticia), la cuestión es hasta cuantos puede soportar una sociedad que ha sido próspera, es decir, si el número es «sostenible».
La que nos han organizado no tiene nombre y el niño o niña que llegue a este mundo podrá, dentro de veinte o treinta años, consultar en su historia pasada, que a principios de la segunda década del siglo XXI, se estaba viviendo una etapa de desconcierto, sumada a los cambios tecnológicos, a las tendencias sociales, a las turbulencias políticas y sobre todo, a que nadie daba respuesta a un nuevo camino que sin duda hubo que construir.

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 Desde que el Sr. Rato anunció su dimisión (y van dos) de Bankia, antiguamente Caja Madrid, vemos como se diluyen al igual que azucarillo en un café los efectos esperados del que llegó para hacer sostenible un banco que, también, hacía aguas, a pesar de sus esfuerzos para salir a Bolsa. La levedad bancaria en nuestro país se sumó a la top league anunciada en los años que se ponía en el mercado global como ejemplo (ver hemerotecas) de su fortaleza. Pero no importa, todo se olvida y mientras los ciudadanos crean que tienen seguros sus euros, será otra noticia más de este » vivo sin vivir en mí, y de tal manera espero que muero porque no muero» , como decía Santa Teresa
Como estará la cosa que hasta el Sr. Rubalcaba dice que tiene en la entidad sus ahorros y que no los sacará, pues están seguros… ¿Será verdad?
Pero a esta tragedia que surge de las torres de la plaza de Castilla madrileña, donde se alzan inclinadas (parece que se caen, pero no) acogiendo la sede central de Bankia, aparece en el horizonte cercano, cerca del hotel Meliá Castilla, un oasis para el disfrute de los que aprecian la sostenibilidad del champán y las ostras,(referencia de que la buena vida sigue existiendo) en un nuevo local que se ubica en el nº 48 de la misma calle, » The KISS by Klimt «.
Este canto al sabor marino de las ostras de Belon, el salmón salvaje o el caviar acompañado de una copa de un Dom Perignon, Krug o Mumm, hace olvidar las levedades diarias que los medios de comunicación o el BOE se encargan de transmitirnos.
En resumen, la cosa parece no estar tan mal para algunos…

La nueva hoja de ruta de las empresas turísticas. Hoteles Sostenibles

El Turismo y la Sostenibilidad

El próximo 20 de junio se abrirán las puertas a la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible.
El pasado 23 de abril se celebraba en Estocolmo el Fórum Stockholm+40 (Suecia), como reunión previa a la de Río de Janeiro. El Secretario General de Río+20, Sr. Sha Zukang, decía:
«nosotros compartimos este planeta y debemos encontrar soluciones compartidas, en colaboración.»
Es cierto que ha habido muchos avances desde la primera Cumbre de Río en 1992, pero todavía quedan muchos objetivos por cumplir como la erradicación de la pobreza, la sanidad, educación, la vivienda, el trabajo, la libertad, etc., que, también, son objetivos del Milenio.
Quizá, el gran logro que conseguido a estas alturas del siglo XXI, ha sido el de la transparencia. Ya no son reportajes transmitidos por una radio o por un periodista que se introduce, después escribe y nos cuenta sus experiencias, que sí nos han ayudado mucho. Pero ahora, la imagen nos la llevan a casa. Vemos las guerras en directo, los infortunios de la población que debe abandonar sus casas convirtiéndose en desplazados a la fuerza, las sequías y falta de agua, la realidad del hambre, los niños con sus miradas perdidas o con sonrisas de esperanza o desconsuelo y, la mayoría de las veces, con falta de escolarización.
Rio+20 será una nueva oportunidad para reflexionar sobre este mundo convulso que busca salidas a los «atascos» que el siglo XX ha ido produciendo por su propio desarrollo. La gran crisis, pues no solo la económica, es la de los valores. La de entender y comprender que el futuro no es de unos pocos, sino de todos. Por el momento, compartimos el planeta, pero algunos se niegan a compartir sus beneficios y esto, tarde o temprano tendrá que cambiar. Necesitamos un desarrollo sostenible «sí o sí».

La nueva hoja de ruta de las empresas turísticas. Hoteles Sostenibles

El Turismo y la Sostenibilidad

Son dos palabras de uso corriente en todos los aspectos de la vida, empresariales, personales, institucionales, etc.

Si uno habla con un modisto o modista de los que exhiben sus prendas en las pasarelas, dirá que ha creado nuevos modelos para la próxima temporada. Dijo hace tiempo, el francés  Jack Maximin,  propietario y chef  del Bistrot de la Marine ( Cagnes Sur Mer, entre Niza y Cannes) a nuestro cocinero más mediático, Ferrán Adriá, que  «crear no es copiar».

Para muchos la innovación parte de la creatividad, siendo ésta la parte del pensamiento divergente y convergente que nos pone en el camino de la innovación para la materialización de la idea o de lo nuevo que queremos implantar. La diferencia entre uno y otro término es  que el objetivo de la innovación a nivel empresarial es económico y requiere resultados pues de lo contrario es un fracaso.

 En un texto de ONUD (Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial)  se dice:

» La creatividad no es una parte aislada de nuestro pensamiento y no es un lujo que solo los artistas pueden permitirse. Es una parte de nuestro pensamiento de tal calidad, que existen diferentes áreas. Todas las definiciones de creatividad expresan la novedad de las ideas –el aspecto cualitativo- y la abundancia de las mismas –el aspecto cuantitativo. Así, el pensamiento creativo puede ser definido también como la capacidad de llevar algo a la realidad, algo que no existía anteriormente y en este sentido, la creatividad tiene que ir más allá de la experiencia y ser de alguna manera revolucionaria. Solo la implementación económica de una idea puede ser llamada innovación».

Los Perfiles Profesionales de los directivos hoteleros en el siglo XXI.

Creo que en muchos países del mundo se ha oído un estremecedor «grito» al conocer la subasta del cuadro «El grito» por 91 millones de euros del pintor expresionista noruego Edward Munch (1863-1944).

Según cuenta Munch, «caminaba yo con dos amigos por la carretera, entonces se puso el sol; de repente, el cielo se volvió rojo como la sangre. me detuve, me apoyé en la valla, indeciblemente cansado. lenguas de fuego y sangre se extendían sobre el fiordo negro azulado. Mis amigos siguieron caminando, mientras yo me quedaba atrás temblando de miedo, y sentí el grito enorme, infinito, de la naturaleza».

La valoración de un cuadro como éste, que da la impresión de ser pintado por un niño o niña en una escuela de primaria, se sale de la mente de un ciudadano normal y solo en este ir y venir de la economía subterránea, la desconocida por la mayoría de los mortales , se podría entender el desorbitado precio pagado.

Lo comprenderíamos mucho mejor si el importe de la subasta del cuadro llevara consigo una tasa para la educación del mismo valor repartida entre los pueblos más necesitados del planeta.

Otro «grito» lo ha lanzado el maestro de la Cocina Martín Berasategui que ha sido olvidado en la nominación de los premios de la revista Restaurant. Se queja, habla de manipulación y cree que debían también estar otros, como Pedro Subijana del restaurante Akelarre.

En fin, entre grito y grito, el Real Madrid por fin ha ganado la Liga y esto produce una alegría infinita a los fans madridistas y un desencanto a los culés que pierden a uno de los mejores entrenadores del mundo, Guardiola, toda una escuela del comportamiento humano en el deporte.

La nueva hoja de ruta de las empresas turísticas. Hoteles Sostenibles.

Se han empeñado en que la Bolsa siga en su «vía crucis» de las últimas semanas, bajando de los 7.000 puntos de referencia, sin otear un mejor horizonte, a pesar de los recortes de «los dolores de los viernes». Los especuladores se frotan las manos y los pequeños ahorradores van diciendo «nunca mais». El nivel de estrés de la ciudadanía se soporta con los días festivos, el cambio climático (llueve y nieva cuando no toca) y la subida de «casi todo».
A pesar de todas estas anomalías terrenales siempre llega alguna buena noticia. Por ejemplo dos de nuestros mejores restaurantes se han clasificado en el 2º y 3er.puesto en la clasificación de los Best Restaurants del mundo que la revista británica Restaurant nominó el pasado 30 de abril en Londres: El Celler de Can Roca y Mugariz, donde ofician el arte culinario los hermanos Roca y Andoni Luis Aduriz, respectivamente.
También, en la lista de los primeros puestos está Arzak, el Asador Etxerri y Quique Dacosta. A Elena Arzak la premiaron como la mujer  mejor Chef del mundo.
Al otro lado del Atlántico la revista Time reconocía  a nuestro mediático cocinero José Andrés como uno  de los cien personajes más influyentes del año, al igual que en su día lo fue Ferrán Adríá. Lo que más gusta del personaje es que tiene un perfil de «buena persona» ,muy importante en la época que vivimos ,además de hablar un excelente inglés, un ejemplo para nuestra juventud.
También, en Nueva York, se ha celebrado The Diner des Grands Chefs.   El pasado 16 de abril, en  el Gotham Hall de Broadway acogió  la sede de la segunda edición de la Cena des Grands  Chefs Relais & Châteaux .  En esta edición, 45 de los  Chefs más reconocidos dieron continuiación a este World Tour Culinario, que comenzó hace un año en Francia, en el Palacio de Versalles.  El anfitrión del acto fue el español Jaume Tapiés,  elegido el pasado año durante la votación oficial celebrada en el 31 Congreso internacional de Relais & Châteaux en Ginebra, para presidir esta asociación internacional de prestigio.
Y, como la Educación de nuestros jóvenes nos preocupa, mala noticia para los repetidores: dicen que no podrán pasar curso, unos y otros, los universitarios,  tendrán que aprobar todas para conseguir una beca, con una nota mínima de 6. Hay que esforzarse más pues el futuro es de ellos y, quizá, no se les explica lo suficiente.

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El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha declarado que la economía que hasta ahora estaba enfocada al «ladrillo», hay que enfocarla a una «economía más basada en el conocimiento».

En las conclusiones de la III Cumbre del Turismo, celebrada hace unos días, la formación ha entrado a formar parte, como era natural, de las 20 medidas que dicen se deben adoptar para «LIDERAR EL FUTURO»:

11. Formación, el principal medio para mejorar la competitividad de las empresas y el empleo de sus trabajadores, con una doble prioridad: mejorar el sistema actual de Formación Profesional para el Empleo, y avanzar en la consolidación del sistema educativo basado en las competencias profesionales.

Una vez más, dentro de los múltiples encuentros relacionados con el Turismo, la formación no ha podido faltar. El contenido es repetitivo año tras año, sobre todo desde que se pusieron de moda las competencias

Una de las medidas que se deberían haber tomado hace mucho tiempo es la obligatoriedad de los Certificados de Profesionalidad que duermen en el limbo a la espera que la Unión Europea los apruebe. Si los Certificados, que están en el BOE con sus contenidos, hubieran sido exigidos para trabajar, hoy tendríamos unos recursos humanos con un mayor nivel de formación del que nos encontramos.

Da la impresión que los de las Cumbres no se pasean o visitan bares, restaurantes cafeterías u hoteles donde la formación escasea. No nos referimos a las estrellas Michelín o alojamientos de lujo (aunque, también, algunos cojean) sino a los miles de establecimientos hosteleros que tiene nuestro país cuyo objetivo, según la Cumbre, es «liderando el futuro».

Por eso, el Sr. Ministro se ha dado cuenta que estamos en la «era del conocimiento» que es el activo intangible que mayor valor tiene en una empresa. Estamos de acuerdo, la economía de un país en el siglo XXI no puede estar en la top league sin conocimiento. El sector turístico, sus empresas y las personas que forman parte del mismo necesitan, simplemente, formación. Es la que nos va a asegurar el futuro, la que nos permitirá ser más competitivos y la que nos ayudará situarnos en un nuevo escenario más realista y, sobre todo, sostenible.

Los Perfiles Profesionales de los directivos hoteleros en el siglo XXI.